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La Senda de los Diálogos Perdidos
Entre las voces más prometedoras de la narrativa venezolana, destaca la de Mario Morenza por la variedad y eficiencia de los recursos retóricos y estrategias narrativas que pone en acción para ficcionalizar el espacio urbano inmediato. La cotidianidad del condominio adquiere en este libro la dimensión extraordinaria de un universo cambiante y sorprendente. Página a página, su escritura ensaya una mirada lúdica sobre los aconteceres de personajes a medio camino entre la realidad invisible y la fantasía evidente. Morenza juega con una poética de lo urbano en el microcosmo de la urbanización, aborda la narratividad de un día a día colmado de historias cuya trascendencia nace del arte de contarlas desde el vórtice de la imaginación desenfadada, la vivencia acumulada de tanta ciudad y la reflexión enclavada en su mirada joven y audaz. Sorprende la solvencia del cuentista cuando nos pasea por los diferentes habitáculos/capítulos de este libro/condominio donde la diversidad de la existencia adquiere las formas de un caleidoscopio profundamente humano. Una referencia cardinal de nuestra joven ficción breve.
Rubén Darío Jaimes